Luis Estrada

LUIS ESTRADA

Gerente General

Universal Music Latino

Hace un par de números informábamos sobre el ejército UMLE para ganar la batalla a la crisis discográfica. Comenzaba la estrategia con reajuste del organigrama, bajo la dirección general de Jesús López. Y en uno de los frentes de este ejército destacaba el nuevo nombramiento en junio, como Gerente General de Universal Music Latino, de Luis Estrada.

Comenzamos hablando, como es lógico, de la crisis y la estrategia para enfrentarla. Me responde:

— Primero que nada hay que cambiar la mentalidad, entender que estamos en la transición a una nueva era, cuidar las inversiones, seguir siendo agresivos pero apostar por aquellos artistas que tienen claro este cambio y que están dispuestos a trabajar de la mano con su disquera y en un nuevo contexto de industria donde la mentalidad “old school” no tiene cabida. Segundo, tenemos que diversificar nuestros negocios. La música no es solamente discos compactos o tracks digitales. Es mucho más que eso y hay que explotarlo y darle su justo valor y dimensión y no regalarla nunca con el falso argumento de “la promoción”, llámese en películas o programas de TV, campañas publicitarias, integraciones de producto, “branded entertainment”, productos precargados como teléfonos celulares o tarjetas de memoria, patrocinios, deportes, juegos electrónicos, merchandising, conciertos e infinidad de oportunidades de negocios donde ya tenemos una presencia la cual hay que acrecentar. Obviamente hay que estar un paso adelante en cuanto al avance digital se refiere y en eso Universal Music es la compañía más agresiva. Es un hecho que vivimos en la era donde hay más música a nuestro alrededor, entonces hay que capitalizar esta gran oportunidad que la tecnología nos brinda. Pero lo más importante de todo es que el negocio sigue y seguirá siendo de grandes canciones, voces únicas y carisma. Hay que seguir buscándolas. estar atentos en Internet, en las redes sociales, en la calle, en los bares, en la noche misma. Debemos ser dinámicos y estar abiertos tanto con los artistas noveles como con los que han tenido una carrera. Tenemos que pensar que siempre vamos a aprender algo nuevo, no todo está escrito y lo que pensamos que nunca le iba a gustar a la gente mañana puede ser un éxito rotundo. Hay que estar viendo la evolución de la música y de los gustos de la gente. Hay que salir a respirar lo que pasa con el público. El mercado latino de Estados Unidos es uno de los más fascinantes, está en plena conformación social y cultural, está encontrando su identidad entre las distintas generaciones que lo conforman y a la vez está en evolución permanente. Dentro del mundo anglo, hoy es mucho más “cool” ser latino que hace cuarenta años. Los latinos están mucho más mezclados en la sociedad, jugando roles clave en todos los ámbitos de la misma, comenzando por el arte y la cultura. Me encanta ver a Robert Castillo tocando con Metallica, a Bruce Springsteen invitando al rockero texano Javier Escobedo a tocar en su concierto, a Quincy Jones admirando el trabajo de Juanes en la revista Time, a Gustavo Santaolalla ganando Oscares por su música para películas anglos, a Cafe Tacvba tocando en Coachella y varios de los festivales anglo más importantes del país o a Billy Gibbons de ZZ Top tocando con Luis Fonsi en los Grammy Latinos, entre miles de ejemplos más…

— En el día de hoy, ¿con qué agenda te pillo sobre la mesa?

— El presente me encuentra lanzando grandes discos, como el nuevo de Luis Fonsi que es un excelente álbum, de grandes canciones y producción impecable y me encuentra consolidando un equipo de marketing, medios y promoción que pretendo sea el mejor de la industria, el más creativo, dinámico y agresivo.

No hay tiempo para contemplaciones, la industria está en medio de la transición hacia la nueva era y no hay que pararse a llorar si las ventas de CDs van a la baja semana a semana, o si los retailers siguen cortando su espacio para la venta de discos…hay que seguir atacando porque hay vida todavía en el mercado físico y obviamente hay que pensar todo el tiempo en el nuevo mercado movil y digital. Nos gusta tener una comunicación clara y directa con nuestros artistas y esto lo fomentamos en la compañía… ellos son los primeros que tienen que entender la situación, adecuarse y ser cómplices con nosotros de las nuevas estrategias. Si los fans están en Internet pues hay que acercarse ellos, el website es su nueva casa, los artistas tienen que escribir en su blog y participar en los foros, ¡proporcionarles material inédito a los fans!, videos de ensayos, fragmentos y adelantos de canciones, entrar en una nueva dinámica donde todos estamos aprendiendo lo que funciona y lo que no, asi que se vale experimentar, se vale intentar. Y funciona, la Internet funciona y es el nuevo campo de batalla. El caso de Fonsi es claro. Llevamos tres años trabajando fuertemente de cerca con sus fans en su foro y en su sitio web y esto ha sido parte clave de la campaña de lanzamiento. Claro que la radio sigue siendo la columna vertebral, pero una campaña sin tácticas y estrategias agresivas de Internet está coja e incompleta.

— ¿Cuándo y cómo comenzó tu carrera con Universal Latino?

— En el 2005, me trasladaron a Universal Music Latino en Miami a trabajar en el área de marketing bajo la dirección de Walter Kolm. Ahi he tenido la suerte de trabajar las campañas de grandes artistas como el mismo Juanes, Luis Fonsi, David Bisbal, Enrique Iglesias, Paulina Rubio, Cristian Castro y Jeremias, entre muchos más.

— ¿Respecto a tu inicio en el mundo de la música, del disco…?

— Comencé en la industria de la música en el 91, mientras estudiaba la carrera de marketing y formé mi banda de rock. Nos llamábamos Los Lagartos, tocábamos punk-rock, no éramos virtuosos pero teníamos canciones que divertían y prendían a la gente. Nos firmó el Sello BMG-Culebra en México, que fue creado por Jesús López en el 92 para darle salida a las diversas propuestas de rock que habían en México en ese momento. Fue una época maravillosa, había conciertos todo el tiempo, lugares para tocar, decenas y decenas de bandas activas que continuaron el movimiento que habían empezado en el 87 bandas como Caifanes, Maldita Vecindad, Neon y Fobia, asi como antes Botellita de Jerez, Kenny y los Eléctricos y Ritmo Peligroso, en 1984.  Desde el principio me di cuenta que me gustaba la parte del negocio, era mánager del grupo y negocié el contrato con BMG. En el 97, mientras promocionaba el segundo disco de mi banda y celebraba nuestro segundo número uno de radio en la única estación que tocaba rock en México en esa época, puse un pequeño sello discográfico para lanzar bandas underground que no tuvieran posibilidades de que una disquera grande los promoviera. Asi lanzamos tres discos en ese año donde me diverti mucho haciendo absolutamente todos los procesos dentro una disquera, la parte artística, el mercadeo, distribución y también organizábamos conciertos donde el boleto de entrada era el CD, asi que sólo en la presentación del disco ya habíamos vendido mil unidades. Más adelante, después de un año de haberme mudado a vivir a Puerto Rico, en el 2000 regresé a México determinado a trabajar en una disquera grande. Empecé en la división de música de TV Azteca, en la parte de marketing, que me interesaba porque era la carrera que había estudiado y porque según yo, sabía hacerlo…aunque hacer rock era muy diferente a hacer pop, asi que en Azteca Music aprendí mucho de pop, llevando un proyecto de “boy-band” llamado UFF, unos chicos venezolanos que fueron un fenómeno en Mexico, tanto de ventas como de conciertos. Fue un año donde recorrí todo el país, hicimos todos los festivales de radio existentes y también estuve trabajando dentro de una televisora, lo que me hizo también aprender mucho de las producciones de TV. En el 2001 entré a Universal Music Mexico a hacer A&R y Marketing de rock, pero rápidamente me empecé a involucrar también en proyectos pop. En la parte de marketing tuve la fortuna de comenzar a trabajar en la recta final del primer disco de Juanes, “Fíjate Bien”, justo antes de sus múltiples nominaciones a los Grammy Latino, que fue el momento clave donde despegó su carrera. Nunca olvidaré el día en que, meses después, llegó a la compañía el sencillo de “A Dios Le Pido” y lo escuchamos todos…era demasiado evidente que era un hit, una canción demasiado hermosa, demasiado perfecta, y fue una alegría muy grande para todos. Lo demás es historia y es uno de los grandes privilegios que me ha dado trabajar en Universal.